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Se habría logrado acuerdo para “congelar” posible alza del 15% de las cuentas del agua potable en Atacama

Este viernes pasado, las autoridades de las SISS (Superintendencia de Servicios Sanitarios) habían anunciado que se encontraban “explorando alternativas de financiamiento de los costos de operación de la planta desaladora de Atacama, para reducir el impacto tarifario que asciende a 15% de acuerdo a la estimación inicial tras concluir el proceso tarifario con Aguas Chañar”

En esa misma oportunidad señalaron que este costo “habría llegado al 40% de no haberse contado con el financiamiento total de la planta a través de recursos públicos”.

Respecto de la calidad del agua que se obtendrá en esta nueva planta desaladora, el titular de la SISS destacó que el abasteciendo a la comunidad con un producto de acuerdo a los requisitos vigentes, con todos los parámetros medidos por la Norma Chilena NCh 409 en regla, lo que va en directo beneficio de la salud y de la calidad de vida de las familias que residen en la zona, y que “en consecuencia los vecinos podrán con toda seguridad tomar agua directamente de la llave y con ello generar un importante ahorro en su presupuesto al sustituir la compra de agua embotellada por agua de la llave”, señaló el superintendente (S) de Servicios Sanitarios, Jorge Rivas.

Es en este contexto que parlamentario de Atacama se reunieron este lunes con el Ministro de Obras Públicas, Rafael Moreno en Santiago, para tratar la eventual alza del costo del agua en la región.

En primera instancia se habría llegado a un acuerdo para “congelar” los precios del servicio de agua potable en Atacama, por lo menos en 2020, lo que deberá ser confirmado por el titular del MOP mientras se lograr una propuesta definitiva.

Desde la SISS indicaron que el costo de construcción de la planta desaladora “es de más de US$ 110 millones, financiada por el Estado a través de la Empresa Concesionaria de Servicios Sanitarios (ECONSSA), dueña de la concesión que es explotada por Aguas Chañar. Dichos recursos fueron íntegramente aportados por el Fisco, precisamente para evitar que el costo fuera a recargar las cuentas de los clientes.”

 

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