La menor producción y el alza de costos repercutieron en el primer semestre en las utilidades de la industria, que redujo sus beneficios en más de 30%. El pago del impuesto específico a la minería también tuvo un fuerte retroceso. Aunque el precio promedió un valor récord en la Bolsa de Metales de Londres, su abrupta baja afectó al final del período los precios de venta efectivos.
El cobre ha bajado su precio, pero en el primer semestre registró un período récord: en promedio, entre enero y junio cotizó en la Bolsa de Metales de Londres a US$ 4,43 la libra, un 7% más que en la primera mitad de 2021. Aún así, la industria minera redujo sus ganancias: una conjunción de factores afectaron su desempeño, los que se resumen en menor producción, leyes más bajas y costos más altos. Así lo ocurrió a Codelco, cuyos excedentes descendieron 35%, hasta US$ 2.377 millones. Y así también le ocurrió a varias de las grandes empresas privadas que operan en Chile y que entregaron sus balances al cierre del primer semestre el viernes de la semana pasada a la Comisión para el Mercado Financiero, un registro obligatorio en el que deben reportar el impuesto específico a la minería. Aunque no todas lo hacen de la misma manera.
Según la revisión realizada por Pulso, 25 empresas mineras privadas acumularon ganancias por casi US$ 4.000 millones en el primer semestre, cifra que es un 36% más baja en enero-junio del año anterior. No todas la empresas detallan el pago de royalty, una cifra que grava la renta operacional con una tasa de 5% a 14%, dependiendo del resultado operacional de cada empresa: algunas registraron pérdidas y otras informan suman el impuesto corporativo con el impuesto específico a la actividad minera y no lo desagregan. Aún así, en las que lo informan claramente, una decena de empresas, el royalty descendió un 40%, al pasar de US$ 700 millones a cerca de US$ 424 millones. Cifras más, cifras menos, la tendencia es la misma.
De total de empresas mineras basadas en Chile, solo dos tuvieron utilidades superiores a los US$ 1.000 millones. La que obtuvo el mejor resultado fue Escondida, que opera el mayor yacimiento en Chile, controlada por BHP. Escondida ganó US$ 1.763 millones, un 10% menos que los US$ 1.964 millones de hace un año. Aunque produjo más cobre que hace 12 meses -515 mil toneladas, versus las 496 mil de enero-junio de 2021-, sus ingresos totales bajaron 5,7%, hasta US$ 4.671 millones. Escondida fue, aún así, la que mayores impuestos pagó al Estado. Según divulgó el jueves de la semana pasada, en impuestos canceló US$ 804 millones. En sus balances, Escondida reportó que los impuestos relacionados con los royalties ascendieron a US$ 179 millones, más que los US$ 150 millones de hace un año. En el período, dicen los balances, Escondida pagó dividendos por US$ 1.961 millones a sus accionistas. El la primera mitad de 2021 fueron US$ 2.400 millones.
A Escondida le siguió Collahuasi, controlada por Anglo American y Glencore, que ganó US$ 1.025 millones en los primeros seis meses de 2022. La cifra es 24,5% menor que hace un año. En ello incidieron una menor producción y un alza de costos, según se desprende de sus estados financieros. La compañía disminuyó en un 12% su producción, al bajar desde los 331 mil toneladas de cobre fino de 2021 a las 290 toneladas en el primer semestre de 2022. Sus costos (C1) se elevaron desde US$ 0,68 la libra a US$ 0,96 la libra.
El Ebitda de Collahuasi llegó a US$ 1.847 millones y reconoció como impuestos un total de US$ 512 millones. Esa cifra incluye US$ 143 millones de impuesto específico a la minería, indicó en una carta a la CMF su presidente ejecutivo Jorge Gómez. La misma carta de hace un año informaba un pago de royalty de US$ 232 millones. Un descenso de 38%. Collahuasi informó en sus balances que la tasa del impuesto específico a la actividad minera aplicada al 30 de junio de 2022 fue 9,35%, versus 9,46% al cierre de 2021.
En el resto de las empresas mineras relevantes también se anotaron disminuciones abruptas. Los Pelambres, la principal operación del grupo Luksic, redujo sus ganancias en un 66%, desde US$ 807 millones en 2021 a US$ 269 millones este año. Lo mismo con Centinela, la otra mina Antofagasta PLC, que descendió 57% desde US$ 356 millones a US$ 151 millones. En total, Antofagasta PLC produjo 268 mil toneladas, un 25% menos que el año anterior, lo que el grupo atribuyó a la sequía y a un incidente en el concentraducto de Los Pelambres. En el pago por royalty, los Pelambres pasó de US$ 105 millones a US$ 26 millones.
Otra de las grandes mineras privadas que sufrió fue Anglo American Sur, cuyas ganancias bajaron desde US$ 604 millones a US$ 231 millones. La compañía es la tercera con las mayores ventas del país, cifra que descendió un 24% en los últimos 12 meses, al retroceder desde US$ 1.740 millones a US$ 1.323 millones. La producción de Los Bronces, su principal unidad, retrocedió 21% en el último año: pasó de 163 mil toneladas a 129 mil toneladas este año. Lo mismo en El Soldado, que bajó de 20 mil a 15 mil toneladas, un 24% menos. Anglo American Sur redujo así el pago de impuesto específico a la minería desde US$ 36 millones en el primer semestre de 2021 a US$ 14 millones este año.
Las operaciones que sí elevaron sus resultados fueron Spence, de BHP, que saltó 11%, hasta US$ 194 millones; Lumina Copper, que las elevó en un 21%, hasta US$ 128 millones; y Zaldívar, con un incremento de 67% (ver infografía). En el top 10 también se ubicó Minera Candelaria, que facturó US$ 748 millones este año y ganó US$ 160 millones.
Aunque no es una productora de cobre, otra minera está sujeta también al impuesto específico: la Compañía Minera del Pacífico, la filial de CAP que es el principal productor de hierro del país: la firma redujo el pago de royalty desde US$ 96 millones en el primer semestre de 2022 a US$ 22 millones este año.
El factor del “precio de realización”
No solo incidió en las bajas la menor producción. Otro factor tuvo una gran influencia: aunque el precio promedio reportado por Cochilco para el primero semestre batió los récord, al promediar los US$ 4,42, versus los US$ 4,12 del primer semestre de 2021, según la Bolsa de Metales de Londres; el precio de venta es distinto. Las grandes mineras hablan de precio de realización: el precio que reciben finalmente es el valor que pagan los compradores cuando recepcionan los envíos en destino, y no cuando embarcan su producción. Y el precio descendió violentamente en el semestre. Si el 7 de marzo alcanzó un máximo de US$ 4,86, el 30 de junio cerró el período en US$ 3,73.
En la presentación de resultados, por ejemplo, Antofagasta Minerals reportó que el “precio promedio realizado del cobre” cayó un 6,6% en el primer semestre, al marcar US$ 4,13 versus los US$ 4,42 del primer semestre de 2021. También lo advirtió Codelco, cuando reportó la caída de excedentes del primer semestre, el 28 de julio. “La caída del precio del cobre de las últimas semanas que se traduce en un menor precio de realización de -7% respecto al mismo periodo del año anterior”, explicó Codelco en la presentación de resultados.
Fuente: Redimin