El titular de Educación argumentó que el libelo acusatorio dio pie a un aumento de desconfianza en el retorno a clases.
Ayer terminó el capítulo de la Acusación Constitucional contra el ministro de Educación, Raúl Figueroa, luego que la acción impulsada por la oposición fuera rechazada con 71 votos a favor y 76 en contra. Entre estos últimos, cuatro independientes (Pedro Velásquez, Carlos Jarpa, Pablo Lorenzini y Pepe Auth) y el DC, Matías Walker.
Pese a la caída del libelo acusatorio, marcado desde su inicio por críticas de “nulo sustento jurídico”, y más bien “impulsado por desacuerdos políticos”, el titular del Mineduc analizó su propio rol en el proceso, especialmente en la forma en que se ha intentado avanzar en el restablecimiento de la confianza para que los padres lleven a sus hijos a los colegios.
“Por supuesto que uno siempre pudo haber cometido errores, la comunicación en esto es fundamental, y yo he hecho esfuerzos permanentes por enmendar y mejorar, y sobre todo la comunicación”, sostuvo en entrevista con ADN. Agregó que, el resultado de ayer “nos va a ayudar en ese sentido, porque se dio una señal al país muy potente. La mayoría de la Cámara lo que hizo fue marcar una diferencia; decir, señoras y señores, los debates estériles no tienen cabida en este ámbito, tenemos que comprender la magnitud del desafío y trabajar en conjunto”.
De hecho, planteó que durante todo este periodo se generó fue una “tensión” que desde el temor de las familias era comprensible, pero “muy poco comprensible respecto a algunos grupos que magnificaban esa tensión”. “Yo creo que la señal del Congreso es para todos, no perdamos más el tiempo en esto, hay mucho que avanzar”.
Magisterio “tiene una silla puesta” en el Consejo Asesor
Figueroa también envió un mensaje al Colegio de Profesores, gremio que apoyaba la acusación en su contra, por discrepancias en torno a la gestión para el retorno a clases presenciales voluntarias, especialmente porque la propuesta de Educación -también contemplada en el Plan Paso a Paso del Minsal- la permite incluso en comunas en cuarentena.
“En esto no podemos tener diferencias en torno al objetivo; puede haber en torno a las maneras, eso es legítimo, pero el objetivo nos tiene que unir”, dijo Figueroa. Además, recordó que las puertas están abiertas y el gremio tiene “una silla puesta” en el Consejo Asesor. “Me encantaría que en la próxima reunión llegaran para poder trabajar en como sacar adelante este proceso”.
Asimismo, pidió ayuda al gremio -que propone el retorno a clases sea en fase 4 (Apertura Inicial)- para que los colegios que están en dicha fase puedan abrir al 100% sus puertas. “Ahí ya tenemos un acuerdo”, puntualizó el titular del Mineduc.
Como ejemplo, dijo que al menos la mitad de colegios que tienen entre 5 y 10 alumnos en el país -de un total de 3.000 de estos establecimientos- siguen cerrados, la mayoría de ellos ubicados en zonas rurales “donde el covid-19 está muy controlado”.
El retorno aún está al 50% porque “hay un legítimo temor de la ciudadanía en torno al covid-19, pero quienes tenemos posiciones de autoridad en los gobiernos, municipios y gremios, no podemos paralizarnos, y ciertos grupos han generado cierta parálisis en torno al susto, y han distorsionado a veces las verdaderas condiciones que existen para la reapertura.
A su juicio, “la misma acusación constitucional generó su parte”, recordando que en su capítulo 3 el texto apuntaba a que su gestión “en contra la vida y la salud física y psíquica”, y frente a ello “un padre que no tiene por qué estar viendo las noticias, dice ‘esto es muy peligroso'”.
Fuente: Emol.com
