Con el objetivo claro de pasar a segunda vuelta, trabajan por estos días en el comando de José Antonio Kast. Es que su buen desempeño en los debates y su alza en las encuestas, hacen que esta meta parezca más cercana. En los últimos sondeos, el abanderado del Frente Social Cristiano logró superar a la carta de Chile Podemos Más, Sebastián Sichel, cuya campaña pasa por su momento más complejo hasta ahora.
Pese a la buena racha por la que atraviesa su candidatura, el también líder del Partido Republicano continúa con altas tasas de rechazo, superiores a las de los otros aspirantes a La Moneda. Según la última encuesta Criteria Research -publicada el 7 de octubre-, un 50% de las personas señala que no le daría su voto en ningún caso a Kast, seguido por Eduardo Artés (35%), Franco Parisi (33%) y Marco Enríquez Ominami (31%).
Previo a esto, el estudio realizado por el Centro de Estudios Públicos (CEP) -dado a conocer el pasado 15 de septiembre-, mostró algo similar. Allí, Kast figura con un 61% de evaluación negativa, versus un 16% de respaldo.
“La estrategia de posicionamiento de José Antonio Kast se ha basado en la confrontación directa y frontal con quiénes están en la vereda ideológica opuesta, es decir, en su búsqueda de partir el mundo en dos. De manera natural, ello produce rechazo en todos aquellos que se sienten identificados con su contrario, generando una identidad negativa en torno al candidato (…) El alto rechazo a Kast se explica en parte, porque es muy sencillo ‘no ser’ lo que busca instalar en la percepción pública, así las personas buscan auto-definirse como un ‘no’ conservador o como un ‘no’ élite tradicional, por ejemplo”, explicó el académico de la Universidad del Desarrollo, Miguel Ángel Fernández.
El diagnóstico de Kast y su comando
Pero más allá de los motivos a los cuáles se puede atribuir su alto porcentaje de rechazo, aquello podría llegar a ser un factor clave si el candidato logra pasar al balotaje, pudiendo incluso jugarle en contra en su aspiración por llegar a La Moneda.
Kast tiene su propio análisis sobre la situación, así en entrevista esta semana con Emol, el abanderado comentó que “tengo claro que decir la verdad y las cosas de frente tiene un costo y estoy dispuesto a pagarlo. Pero creo que esta campaña y una mayor exposición, permitirá que las personas conozcan nuestra propuesta y sobre todo, nuestra disposición a trabajar por Chile”.
Asimismo, recordó que “dos meses antes de la primaria, Gabriel Boric tenía una tasa de rechazo similar a la que tengo yo, según algunas encuestas. En pocas semanas, la exposición de una elección le permitió revertir esa imagen y derrotar a Daniel Jadue que, inversamente, tenía una mejor evaluación”.
Mismo diagnóstico que tienen en su comando y en Republicanos, desde donde consideran que el rechazo puede ser “mucho más fluctuante” que la intención de voto y no creen tampoco que sea un impedimento para pasar a segunda vuelta. Incluso lo ven como algo “natural”, dado el convulsionado escenario que vive el país.
Pero además, agregan, que esto se debe a la poca exposición mediática que ha tenido el ex diputado UDI, luego de estar en la elección del 2017 y tras la cual ha estado más bien presente por redes sociales. Algo que creen que dificulta el poder terminar con las caricaturas que se han ido formando de Kast y sus propuestas.
Sin espacio, dicen, para mostrar al Kast “real”, era difícil echar por tierra percepciones de extremo o fanatismo, algo que aseguran ha ido cambiando en estas semanas. Ante ello, sus cercanos afirman que no es que el candidato esté “más moderado” o que haya “cambiado su discurso”, sino que ha podido darse a conocer más.
De esta forma, coinciden en que mostrando más a Kast como es y con una mayor exposición mediática también de sus propuestas, se podrá combatir su alta tasa de rechazo e instalar una nueva percepción del candidato. Tendencia que por lo demás, algunos consideran que ya se está revirtiendo con su alza en las encuestas.
La visión de los expertos
El director de Criteria, Cristián Valdivieso, afirmó a Emol TV que la tasa de rechazo que tiene hoy Kast, “puede cambiar, de hecho, en encuestas previas -a la del 7 de octubre- el techo de él era más bajo, él estaba con un ‘no votaría’ entorno al 60% y ha ido cambiando. Los escenarios están en mucho movimiento y yo tendería a pensar que si él se instala como la candidatura de derecha sobre todo enfrentando a Boric, ese rechazo puede disminuir respecto de su propia candidatura”.
“Ahora es poco probable que el contexto cambie tan radicalmente para que mayoritariamente los chilenos salgan a votar por alguien que estuvo en el Rechazo (en el Plebiscito), pero no descartemos que una eventual segunda vuelta pueda darse sobre clivajes que hoy son inesperados (…) No es lo mismo el 20% del Rechazo, que en su minuto estaba bastante arrinconado, que el 40% de gente que está teniendo críticas a la Convención Constituyente, críticas a su actuar. Por lo tanto, podríamos entrar en una segunda vuelta con clivajes que hoy son desconocidos e inesperados”, opinó Valdivieso.
Sin embargo, Fernández cree que Kast “necesita conflicto para crecer, y a su vez esa misma fórmula le cuesta aprobación”. Y aunque recuerda que “no es el candidato con mayor nivel de conocimiento entre la ciudadanía, su historia lo transforma en una figura de muy distinto camino para disminuir su rechazo que Gabriel Boric (…) El mero hecho de que Kast aumentará su conocimiento no se traduciría automáticamente en una baja en su rechazo. Aritméticamente es posible, pero dependerá de la forma y estrategia con que se presente a quienes aún no lo conocen. Si Kast mantiene el boxeo político como carta de presentación, seguirá en la lógica de dividir el mundo en dos y forzará a las personas a estar con él o con su enemigo y ello mantendrá su alto nivel de rechazo”.
Fuente: Emol.com
