La semana pasada distintas autoridades, colocaron la primera piedra, del Proyecto “Mejoramiento Conexión Sector Diego de Almagro-El Palomar” con el objetivo de generar una nueva doble vía que permitirá unir la ciudad de sur a norte y de oriente a poniente, y que cuenta con el aporte del Gobierno Regional de Atacama de unos $3 mil 400 millones para el proceso de expropiación de 28 lotes, dentro de los que se encuentra parte de la Facultad de Ciencias de la Salud de la Universidad de Atacama, ubicada en el Campus Cordillera.
Una situación que fue informada con antelación a las autoridades de esta casa de estudios, y que generará que esta facultad que se verá afectada por estos trabajos, quede emplazada en otro lugar.
Al respecto, el vicerrector académico de la Universidad de Atacama, Forlin Aguilera, indicó en primera instancia, se acordó que el desalojo total de la parte afectada, se realizaría a mediados del mes enero del próximo año, pero tras otra notificación, tendrían que desocupar la zona más crítica que se verá afectada por las obras antes de finalizar el año.
Situación que ocasionó la aceleración de los planes para reubicar parte de la facultad de ciencias de la salud, la cual, ya estaba considerada entre los trabajos por realizar de la universidad, según indicó el vicerrector académico de la casa de estudios superiores.
El académico sostuvo además que, el serviu no cumplió el compromiso de las fechas pactadas con anterioridad por lo que con la última notificación, obligo a desplegar un plan de contingencia.
En consulta sobre esta situación al director de Serviu Atacama, Rodrigo Maturana, a través de un escueto escrito sostuvo que, está “en permanente comunicación con el Rector de la UDA, para abordar todos los pormenores y posibles complicaciones que podrían surgir en el desarrollo de una obra de gran envergadura como esta”.
Por otra parte, Forlin Aguilera, informó, que el lote que se ha visto expropiado por las obras de conexión vial, no pertenecía a la Universidad de Atacama, es un terreno que se mantiene bajo un contrato de arriendo, el cual permanecerá vigente por varios meses más, en el resto del terreno donde funciona las otras dependencias de la facultad, que no se verán afectadas por esta intervención, siendo comprometida la biblioteca, algunas oficinas y una sala de clases, asegurando el directivo de la Universidad de atacama que en ningún caso, se verá afectada la entrega de clases presenciales y de laboratorios de los alumnos que asisten a esta facultad.
