Desde Conaf dicen que en otros casos pueden encontrar hasta 600 kilos de residuos a la semana. Y aseguran que estos afectan al ecosistema de las unidades protegidas, y aumentan el riesgo ante un incendio forestal.
“Nos fuimos caminando desde Saltos del Petrohué hasta el Lago Todos Los Santos, nos demoramos alrededor de 1 hora. A medida que íbamos subiendo por la orilla de la carretera, nos encontramos con mucha basura, empezamos a recogerla y llenamos dos bolsas muy rápido”, relató Felipe Cárcamo, quien visitó el Parque Nacional Vicente Pérez Rosales, en la Región de Los Lagos el pasado 25 de febrero.
“Fuimos con mi pololo, y decidimos tratar de aportar con un grano de arena. Había latas y vidrios de cervezas y bebidas, mascarillas, desechos de envases de comida, y la gran mayoría era basura reciente”, agregó.
La Corporación Nacional Forestal (Conaf) es la encargada de administrar las 106 áreas silvestres protegidas, que se dividen en: 42 parques, 46 reservas y 18 monumentos nacionales a lo largo del país. Además, buscan fomentar el desarrollo de este sector y ayudan a combatir los incendios forestales.
El jefe del Departamento de Administración de Áreas Silvestres Protegidas de Conaf, Mario Pinto, detalló sobre la importancia de que se realicen campañas de concientización para que las personas se lleven la basura que generan.
“En temporada alta en algunas unidades podemos encontrar del orden de 150 a 230 kilos de basura al día, en otros lugares a la semana entre 500 a 600 kilos de basura. Hay todo tipo de residuos como los desechos orgánicos y comida, fundamentalmente al interior de las unidades, pero fuera de estas uno puede encontrarse con cualquier tipo de rastrojo, intentamos evitar que exista basura”, explicó Mario Pinto.
Desde Conaf aseguraron que constantemente están realizando procesos de limpieza junto con organizaciones, y que se han centrado en campañas informativas de educación ambiental para alertar a las personas el daño que puede ocasionar para la flora y fauna dejar los residuos.
Felipe Cárcamo comentó que le parece muy gigante la acción de Conaf, sin embargo, cree que falta educación en los turistas. El visitante afirmó que “cuando llegamos al lago había una serie de recipientes para dejar la basura, pero estaban colapsados y estaban con la basura alrededor”.
Cómo afectan los residuos
Si bien la situación es muy diferente en todas las unidades protegidas de Conaf, realizan programas educativos a través de redes sociales, y también trabajo en terreno con comunidades que colindan con los parques, debido a que en muchas ocasiones las personas dejan la basura en sitios aledaños de estos 106 lugares protegidos.
La basura genera distintos tipos de impacto en la naturaleza, Pinto sostuvo que el primero es “el visual, y es parte de lo que recibimos como recomendación de los visitantes, en las áreas de acopio donde se ve habitualmente la basura”.
El segundo impacto, explica, tiene que ver con la conservación de la fauna nativa. “Está desde la presencia de vectores que atacan la basura, perros asilvestrados por ejemplo, hasta que la basura pueda ser un elemento donde la fauna pueda quedar atrapada en determinado tipo de basura, como las bolsas plásticas. También los animales pueden llegar a consumir estos residuos, y tiene implicancias de punto de vista de la dieta”, señaló.
Una tercera implicancia que genera dejar residuos en parques nacionales o sitios colindantes son los incendios forestales, frente a esta situación Pinto agregó que esto tiene que ver con “peligros que puedan ocasionar la acumulación de desechos. Cuando hay una mayor acumulación de basura puede afectar el ataque inicial de los incendios”.
“Cuando hay una mayor disposición de desechos eso aumenta la peligrosidad, y siempre puede ser perjudicial. Por eso se hacen diversas campañas de sensibilización que orientan a hacer limpiezas, hay trabajos con organizaciones, lo que siempre se busca es el trabajo preventivo, fundamentalmente en las distintas áreas ya sea en el ámbito de los incendios forestales”, agregó el jefe del Departamento de Áreas Silvestres.
¿Qué hacer?
Las autoridades recomiendan que cada vez que las personas visiten las unidades protegidas se lleven sus residuos, de esta manera se puede realizar turismo de forma consciente y no perjudicando el ecosistema.
Mediante las campañas buscan que los visitantes no dejen huella de su estadía en los parques, reservas o monumentos nacionales. Para ello es fundamental que sigan las reglas de Conaf: acampar solo en sectores autorizados y no prender fuego al interior de las unidades, ya que se genera un riesgo y es considerado como un delito.
“Hay campañas donde invitamos a que se visiten las áreas silvestres protegidas sin dejar huella al interior, y eso se simplifica en tratar de concientizar a la ciudadanía y que ellos también apoyen todo el proceso de conservación y de protección de nuestro patrimonio natural, incorporarlos a ellos en este proceso. Buscamos generar este mecanismo de sensibilización, para que los visitantes que generen basura se la lleven fuera de la unidad”, sostuvo Pinto.
Además, el jefe del Departamento de Áreas Protegidas de Conaf aseguró que “hay una apropiación por parte de la ciudadanía al entender que las unidades son una conservación, y en ese sentido tenemos que aportar a mantenerlas como tal”.
Cárcamo cuestionó a los visitantes indeseados. “Entiendo que, además de visitar los parques nacionales con el fin de conocer, proteger la naturaleza, hay que transmitirle a las otras generaciones el cuidado y la importancia en un contexto de crisis climática, y nos deja la pregunta de qué tipo de desarrollo y convivencia queremos para la naturaleza“, sostuvo.
Si bien desde Conaf afirmaron que aún falta aprendizaje ambiental, Mario Pinto concluyó: “En el último tiempo hemos visto un aumento de visitación, pero también de educación, el contexto de pandemia ha permitido generar procesos de educación, y ha habido cambios positivos en la gente“.
Fuente: Emol.com
