Ferrari vive años de decadencia. La escudería que supo ser reina de la Fórmula 1 no gana ningún título desde el 2008 y esta temporada parece que no quebrará su nefasta racha. En el GP de Estiria, sus dos pilotos chocaron entre sí y quedaron fuera de competencia. Papelón. El peor rendimiento en la historia del legendario equipo italiano. Fueron el hazmerreír de la competición. “Son un desastre”, dijo el ex monarca de la categoría Nico Rosberg.
Para encontrar un peor inicio de campaña hay que remontarse a 2009. Charles Leclerc acumula 19 puntos y Sebastian Vettel 9.
Hay mal ambiente en Maranello. Sin un liderazgo potente, todo parece forzado y tenso. A Vettel, que el año pasado tuvo más de un cruce con Leclerc, no le renovaron al contrato y se fue desmintiendo a la dirigencia. Públicamente Ferrari dijo que “era la prioridad”, pero ni siquiera le realizó una oferta.
El ex mandamás del Cavallino Rampante, Luca di Montezemolo, hizo un análisis lapidario. “Si el coche no mejora este año, será aún peor la temporada que viene. Hay que ser valiente para dar por perdido 2020 porque también se juegan 2021 y 2022. Estoy muy preocupado“, afirmó.
Uno de los grandes problemas es el motor. Una serie de poles en la segunda mitad de 2019, levantaron las sospechas. La situación se selló con un pacto secreto entre Ferrari y la FIA, lo que provocó la furiosa reacción de otras escuderías y la amenaza de ir a tribunales. Argumentan que cuando empezaron los controles, “curiosamente”, los autos de Ferrari comenzaron a ir más lento.
El blanco de las críticas ha sido Mattia Binotto, el jefe del equipo. Se dice que no tiene personalidad ni capacidad para manejar un presupuesto millonario. Incluso han circulado rumores de despido. El presidente del grupo Fiat Chrysler, asociado a Ferrari, se muestra tan pesimista que no ve al equipo capaz de ganar hasta que cambie el reglamento en 2022. “Hubo una serie de errores en la concepción del coche”, manifestó John Elkann.
Luca di Montezolo respaldó a Binotto y recordó cómo se trabajaba en los años dorados de Michael Schumacher.
“El problema que tienen está en la organización: ahora sólo hay una persona que es joven y tiene demasiadas responsabilidades sobre sus hombros. De hecho, Mattia Binotto está solo. No hay otros equipos organizados como éste. Binotto es responsable de la gestión deportiva, la gestión de los pilotos, el área técnica y también debe ocuparse de la política interna“, aseguró.
Al parecer los “peces gordos” de Ferrari escucharon y crearon una nueva estructura.
“Lo hemos dicho varias veces, pero vale la pena repetirlo: hemos comenzado a sentar las bases de un proceso que debería conducir a un ciclo ganador nuevo y duradero.Tomará algún tiempo y sufriremos contratiempos como el que estamos experimentando en este momento en términos de resultados y rendimiento. Sin embargo, debemos reaccionar a estas deficiencias con fuerza y determinación para volver a estar en la cima de este deporte lo antes posible“, sentenció Binotto. Ferrari es una bomba de tiempo, precisamente, por ser Ferrari.
Fuente: emol