La Organización de Países Exportadores de Petróleo espera que el consumo de crudo mundial supere los 4 millones de barriles diarios este año, llegando a superar la marca de los 100 millones durante el tercer trimestre.
La Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) mantuvo su pronóstico de un crecimiento sólido de la demanda mundial de crudo en 2022, pese al avance de la variante Ómicron del coronavirus y eventuales alzas de las tasas de interés. Además, aseguró que el mercado petrolero estará bien respaldado durante todo el año.
La visión optimista de la OPEP se conoce en un momento en que los precios del oro negro tocaron sus máximos desde 2014. La ajustada oferta ha dado ímpetu al alza y su último reporte también mostró que el grupo no alcanzó el aumento de producción prometido en diciembre.
En un informe mensual, la OPEP dijo que espera que la demanda petrolera mundial en 2022 aumente en 4,15 millones de barriles por día (bpd), sin cambios desde el mes pasado. El consumo de crudo superará la marca de los 100 millones de bpd en el tercer trimestre, también en línea con la estimación previa.
“Si bien la nueva variante Ómicron puede tener un impacto en la primera mitad de 2022, que depende de cualquier medida de confinamiento adicional y el aumento de las hospitalizaciones que afectan a la fuerza laboral, las proyecciones de crecimiento económico siguen siendo sólidas”, sostuvo la OPEP en el informe.
La organización dijo que es improbable que las subidas de tasas previstas en 2022 para frenar la inflación -consideradas por algunos como riesgosas para la demanda petrolera- afecten al panorama. Una probable alza durante el segundo trimestre por parte de Estados Unidos coincidiría con la temporada de viajes en el hemisferio norte, lo que impulsa la demanda de combustible, señaló.
“No se espera que las acciones de política monetaria obstaculicen el impulso de crecimiento económico global subyacente, sino que sirvan para recalibrar economías que de otro modo se sobrecalentarían”, indicó la OPEP.
“Se estima que el mercado del petróleo seguirá bien respaldado durante 2022”, resaltaron.
El aumento de la demanda este año llevará el consumo de crudo a niveles superiores a antes de la pandemia. Sobre una base anual según la OPEP, el planeta utilizó por última vez más de 100 millones de bpd de petróleo en 2019.
El crudo subió tras la publicación del reporte y operaba cerca de US$88 el barril tras tocar los US$88,13 más temprano, su máximos desde octubre de 2014.
El informe mostró también un mayor bombeo de la OPEP, en un momento en que el grupo y sus aliados, conocidos como OPEP+, revierten de forma gradual los recortes récord de producción implementados el año pasado.
La OPEP+ aspira a elevar el bombeo en 400.000 bpd mensuales, con unos 253.000 bpd de ellos procedentes de los diez miembros de la OPEP cubiertos por el acuerdo, pero la producción aumentó menos de eso, ya que algunos países tienen problemas para extraer más.
El informe mostró que la producción de la OPEP en diciembre aumentó en 170.000 bpd, a 27,88 millones de bpd, por debajo del alza permitido por la OPEP.
Libia y Nigeria tuvieron un desplome del bombeo, mientras que hubo incrementos en Arabia Saudita y otras partes.
Los operadores están atentos a las señales de un gran repunte en el suministro de esquisto estadounidense, ya que los precios más altos generan más inversión, lo que podría acabar siendo una resistencia para los esfuerzos de la OPEP+ de respaldar al mercado.
La OPEP incrementó su previsión de crecimiento en la producción del esquisto en 2022 a 670.000 bpd desde los 600.000 bpd. La previsión de crecimiento para el suministro general ajeno a la OPEP en 2022 quedó sin cambios.
La OPEP dijo que espera que el mundo necesite 28,9 millones de bpd de sus miembros en 2022, sin cambios desde el mes pasado y permitiendo en teoría más alzas en la producción.
Fuente: Emol.com
