La reunión entre Yasna Provoste y el Presidente Sebastián Piñera, convocada como una cita protocolar a raíz de la asunción de la nueva mesa del Senado, terminó transformándose ayer en un primer apronte de las negociaciones que se darán en el Congreso en torno al proyecto del gobierno para postergar las elecciones de abril.
Y es que la conversación inevitablemente estuvo marcada por las exigencias que la oposición había transmitido a primera hora para viabilizar con sus votos el aplazamiento de los comicios para el 15 y 16 de mayo.
- Entre las demandas de la centroizquierda figuran mayores restricciones a la movilidad y un aumento de las ayudas económicas a la población, preferentemente a través de una renta universal de emergencia en torno a los $ 400 mil.
Aunque en un primer momento el gobierno, por intermedio de su vocero Jaime Bellolio, acusó un intento de “chantaje inaceptable”, tras la cita con Piñera en La Moneda la senadora Provoste destacó la disposición del Mandatario a “profundizar las ayudas”.
- “Lo hemos dicho desde un comienzo, para nosotros lo más importante es la protección de la vida de las personas y revisar las políticas sociales, y eso es algo sobre lo cual el Presidente ha manifestado toda su disposición”, dijo Provoste.
Sin buscarlo, a esas alturas la arremetida de la oposición ya había encontrado un inesperado aliado: por la mañana, durante una exposición en el Congreso, el ministro Enrique Paris sinceró que una de las dificultades para mejorar la trazabilidad de los contagios es la resistencia de las personas a revelar sus contactos por el temor a que un aislamiento forzoso los perjudique económicamente.
“Desgraciadamente, mucha gente no quiere dar a conocer sus contactos. Y lo encuentro bastante lógico, porque Chile no tiene preparado un sistema de ayuda social contundente, robusto, que permita que la gente que tenga que aislarse pueda recibir un apoyo económico o de otro tipo. Y eso tenemos que mejorarlo entre todos”, dijo el titular de Salud.
Fuente: latercera
