La Contraloría General de la República tomó razón de la Norma Primaria de Calidad del Aire de Dióxido de Azufre (SO2), situación asociada a la crisis medioambiental que afectó a las comunas de Quintero y Puchuncaví durante el año 2018, se informó desde la Seremi de medio ambiente de Atacama.
Esta norma busca “proteger la salud la salud de las personas de los efectos agudos y crónicos generados por la exposición a concentraciones en el aire de dióxido de azufre. En términos generales, establece un límite horario equivalente a la normativa vigente en la Unión Europea, y viene a reemplazar la normativa chilena que data desde 2002”, precisaron.
Fue así como el Seremi del Medio Ambiente, Guillermo Ready, manifestó que la Región de Atacama no escapa a la aplicación de la Norma Primaria de Calidad del Aire de Dióxido de Azufre, al considerar la relación entre las emisiones y las concentraciones en el aire de SO2, siendo las principales fuentes o actividades emisoras las fundiciones de cobre, las centrales termoeléctricas que utilizan carbón, las industrias que usan petróleos pesados y, en menor medida, el transporte terrestre y marítimo, que utiliza derivados del petróleo.
El Seremi Ready explicó que “el Dióxido de Azufre (SO2), una vez en la atmósfera, ocasiona efectos adversos sobre la salud de las personas y en especial de los grupos vulnerables como asmáticos, Infantes, niños y ancianos. El gobierno del Presidente Piñera, haciéndose cargo de tal realidad, sacó adelante en tiempo récord esta normativa que cumple con los más altos estándares a nivel internacional, lo que junto con la aplicación del DS N°28 “Norma de emisión para Fundiciones de Cobre y Fuentes emisoras de Arsénico”, contribuirán a mejorar la calidad del aire respecto del SO2, en Atacama y en el resto del país, señaló la Autoridad Ambiental.