Tres encuestas este fin de semana mostraron resultados poco favorables para el proyecto de nueva Constitución en el plebiscito de salida: en todos los sondeos se impuso -aunque por poco- la opción del rechazo, en circunstancias en las que todavía no está el texto completo y restan tres meses más de trabajo.
En ese marco, desde la mesa de la Convención Constitucional aseguraron que están trabajando en una estrategia comunicacional para reforzar la información que sale desde el órgano constituyente; pero entre los convencionales también se dieron otro tipo de reflexiones.
Mientras que unos consideran que el tiempo de darse “gustitos” terminó, otros creen que la discusión de los derechos sociales podría aumentar la adherencia ciudadana al proceso; y otros, también, consideran que las encuestas no son fiables por tratarse de sondeos encargados por un sector político específico.
En ese último grupo está el constituyente Daniel Stingo (Ind. FA), quien afirmó que “estas encuestas lo que hacen es tratar de poner un tema, que ha crecido el rechazo, son encuestas además de sectores de derecha, aquí no hay encuestas objetivas (…) los procedimientos son cuestionados”.
Según Stingo ganaría el Apruebo, pero el resultado con el que ganó en el plebiscito de entrada no se va a repetir porque quienes votaron a favor en ese momento tenían expectativas y “no se van a cumplir las expectativas de todos”.
Sin embargo, dijo que “hay falta de comunicación, hay errores nuestros, sí, pero también hay una voluntad de los medios, porque son de dueños empresarios, de querer que esto no funcione”.
A esa misma crítica se sumó Marcos Barraza (PC), que afirmó que “hay una orientación de los grandes medios por instalar temas que no son los que están en debate. Hay una ofensiva sistemática de los grupos de derecha, de los grandes empresarios, que buscan de alguna manera situar un énfasis de la Convención que no es el énfasis que tiene”.
De acuerdo con Barraza, “la voluntad de transformación está vigente, sin perjuicio de las legítimas dudas que puedan existir en los pequeños grupos que no quieren que exista una nueva Constitución o las grandes mayorías que tienen incertidumbre de si esto será más de lo mismo o se generarán cambios. La incertidumbre es transversal”.
La discusión sobre los derechos sociales
Además, está la lectura de que las discusiones sobre pensiones, educación y vivienda, que son las próximas que cobrarán la atención pública, generarán un incentivo a la ciudadanía para apoyar el proceso. Así lo explicó por ejemplo Ingrid Villena (Pueblo Constituyente), quien señaló que “las encuestas siempre van a ser volátiles y van a ir variando a medida que se vayan aprobando lo que más le interesa a la ciudadanía, que son los derechos fundamentales: salud, educación, pensiones, que son temas que se van a debatir en las próximas semanas. Según el resultado de eso irán variando los resultados de las encuestas”.
Para Vamos por Chile, en tanto, se trata del fondo de la nueva Constitución que se ha ido estructurando, y no de la forma de comunicarlo.
“Aquí se estaban cometiendo excesos, imprudencias, se está dejando (fuera) a un sector importante de la sociedad. Y lo que necesitamos, y nunca es tarde, es que la Convención retome el rumbo, satisfaciendo los anhelos de las grandes mayorías de los chilenos que no quieren una Constitución de revancha ni que tampoco haya grupos privilegiados sobre otros”, sostuvo Ruggero Cozzi (RN).
“El chileno tiene mucho sentido común y una Constitución que va en contra del sentido común obviamente va teniendo cada vez más rechazo. Hay un porcentaje muy grande que no votó para dar un salto al vacío sino mejorar lo que había y que no era malo. La gente está diciendo: yo esto no lo quiero, quiero un mínimo de certeza, seguridad, y vivir en un país que tenga armonía, que podamos desarrollar. Pero acá se está generando una división tremenda, odiosa”, complementó Luis Mayol (RN).
Desde el Colectivo Socialista también mostraron una visión crítica, pues a pesar de tomar “con pinzas” las encuestas -según dijeron algunos de sus representantes-, sí consideran que es relevante la señal que están entregando.
“Las encuestas no son certezas, pero sí señales y es importante que tengamos la humildad de reconocer que tenemos problemas. El llamado es uno solo: hay que enmendar esos problemas”, aseveró César Valenzuela (Col. Socialista).
“Estamos en la recta final y ya no hay tiempo para los lujitos, gustitos personales ni show. Lo que tenemos que hacer es concentrarnos en nuestra pega, y esto es ofrecer un buen proyecto de nueva Constitución”, agregó.
Fuente: Emol.com
