Cerrar

Justicia francesa absuelve a Airbus y Air France por accidente del vuelo Río-París donde murieron 228 personas en 2009

La justicia francesa absolvió este lunes al fabricante europeo Airbus y a la aerolínea Air France, que fueron juzgados por “homicidios involuntarios”, por el fatal accidente del vuelo entre Río y París, ocurrido en 2009, que causó la muerte de 228 personas.

Casi catorce años después de la catástrofe del vuelo AF447, el tribunal de París determinó que, si bien las dos empresas cometieron “faltas”, no se “pudo demostrar (…) ningún vínculo causal seguro” con el accidente.

Familiares de las víctimas, equipos de Air France y Airbus y periodistas asistieron este lunes a la lectura del fallo. El anuncio de la absolución provocó que algunas partes civiles se levantasen sorprendidas, mientras el presidente seguía su lectura sobre un silencio sepulcral.

El 1 de junio de 2009, el vuelo AF447, que viajaba de Río de Janeiro a París, se estrelló en plena noche cuando sobrevolaba el océano Atlántico, unas horas después de haber despegado. Los 216 pasajeros y los 12 tripulantes que iban a bordo murieron.

En el avión –un A330 con matrícula F-GZCP– viajaban personas de 33 nacionalidades: 61 franceses, 58 brasileños y 28 alemanes, además de italianos (9), españoles (2) y un argentino, entre otros.

El accidente es el más mortífero de la historia de las compañías aéreas francesas.

Empresas cometieron “imprudencias”, pero no se pudo tipificar un delito

En los días posteriores al accidente se encontraron los primeros restos del avión y de los cuerpos. Pero el fuselaje no fue localizado hasta dos años después, a 3.900 metros de profundidad.

Las cajas negras confirmaron que los pilotos, desorientados por una falla en las sondas de velocidad Pitot en medio de la noche cerca del Ecuador, fueron incapaces de frenar la caída del aparato, que se produjo en menos de cinco minutos.

Las investigaciones mostraron que en los meses anteriores al accidente se habían multiplicado los incidentes de sondas similares, cuyo modelo fue reemplazado en todo el mundo tras el accidente.

El tribunal consideró que Airbus cometió “cuatro imprudencias o negligencias”, especialmente no haber reemplazado los modelos de sondas Pitot llamadas “AA”, que parecían congelarse con mayor frecuencia, en los aviones A330 y A340. También cometió dos “imprudencias” relativas a las modalidades de difusión de una nota informativa dirigida a sus pilotos sobre los fallos de las sondas.

No obstante, según el tribunal, en el ámbito penal “una relación de causalidad probable no es suficiente para tipificar un delito. En este caso, al tratarse de faltas, no se pudo demostrar ningún vínculo causal con el accidente”.

Durante el proceso, que tuvo lugar del 10 de octubre al 8 de diciembre, el tribunal escuchó a expertos, gendarmes, pilotos, autoridades del control aéreo y a familiares de las víctimas, e intentó entender las reacciones de la tripulación en la cabina de mando, así como la peligrosidad de los fallos de las sondas.

Fuente: Emol.com

scroll to top