Desde de un arduo trabajo, el Laboratorio de Biología Molecular y Genómica de la Universidad de Atacama (UDA) logró obtener la certificación del Instituto de Salud Pública (ISP) para realizar análisis en las muestras de variantes del virus SARS-CoV-2.
Hasta el momento, las pruebas eran procesadas en Santiago, por lo que existía un desfase entre la llegada de una variante del virus y las medidas que efectuaba la autoridad sanitaria. Así lo detalla César Echeverría, director de Investigación de la Universidad de Atacama y director técnico del Laboratorio de Biología Molecular.
Para lograr esta acreditación, el laboratorio debió modernizarse gracias a un trabajo en conjunto de la universidad y el Gobierno Regional, con una inversión cercana a los 400 millones de pesos, además de una donación de 200 reactivos por parte del Centro de Control y Prevención de Enfermedades, institución proveniente de Estados Unidos.
Después, realizaron diversos estudios e informes a diversas muestras obtenidas en la región y que obtuvieron resultados similares a los que arrojaba el ISP en Santiago, por lo que este ente decidió darle la autorización al laboratorio.
La idea del director es que, en el futuro, se pueda usar esta tecnología en otro tipo actividades para ayudar a la región y el medio ambiente. Por ejemplo, se podría utilizar en el análisis de patógenos que estén presentes en aguas residuales.
Con esto, la Región de Atacama se transformó en la segunda de la macrozona norte en contar con un laboratorio de estas características. Siendo Antofagasta la única que contaba con esta certificación.
La autoridad sanitaria podrá disponer de este espacio para analizar muestras de distintas regiones de la zona norte del país, es decir desde Arica hasta Coquimbo.
