El senador Francisco Huenchumilla, quién debió asumir la presidencia de la Democracia Cristiana (DC) tras la renuncia de Alberto Undurraga, explicó este domingo el apoyo del partido a la candidatura de Jeannette Jara (PC), decisión que se tomó ayer en la Junta Nacional.
En resumen, el parlamentario afirmó que la exministra del Trabajo está con una coalición de partidos con los que la DC ha trabajado y se conocen, por lo que están en condiciones de volver a colaborar juntos, y además, aseveró que ahora “el comunismo se transformó en capitalista“.
“La militancia DC está convencida de que el anticomunismo hoy día no es un tema en Chile ni en el mundo. Ese es un tema del pasado. Hoy día los temas son la fragilidad de la democracia, el surgimiento de la extrema derecha también en Chile. Y, por lo tanto, ese discurso de campaña del terror de ciertos sectores no hizo efecto con la madurez política de nuestra militancia”, dijo en primer lugar Huenchumilla a Estado Nacional de TVN.
Luego, añadió que también “porque Jeannette Jara está con una coalición de partidos con los cuales nosotros hemos trabajado por más de 30 años, nos conocemos, sabemos lo que pensamos y, en consecuencia, estamos en condiciones de volver a trabajar juntos en base a un programa y también naturalmente en una coalición con un pacto parlamentario para enfrentar las próximas elecciones”.
“A eso se suman las condiciones especiales de liderazgo profesional y carismático de Jeannette Jara, que lo demostró como ministra y en la campaña, así que esas son las razones fundamentales de nuestra decisión”, remarcó.
El senador reconoció que “es un hito histórico“, pero argumentó con que “por primera vez en el siglo XXI aparece alguien del Partido Comunista encabezando un tipo de coalición progresista” y que la determinación sucede “después de que el comunismo cayó derrotado en el mundo, que se cayeron los muros, que ya el comunismo no existe y que el comunismo se transformó en capitalista con una de las principales potencias del mundo, con los cuales Chile tiene buenas relaciones, comercio, y la derecha hace muchos negocios, sin preguntarse por el marxismo-leninismo de los chinos, ¿no? Así que es un mundo distinto”.
Fuente: Emol