Frente al estudio publicado por la académica Sandra Cortés, titulado “Daños en salud asociados a la exposición a Centrales Termoeléctricas a carbón en la zona norte de Chile (2006-2023)”, la empresa ha decidido expresar lo siguiente:
1. El estudio mencionado es de tipo “ecológico”, lo que el propio informe reconoce como una limitación, ya que no permite establecer causalidad directa entre la operación de centrales termoeléctricas y los indicadores de salud observados.
2. El estudio muestra una mejora sostenida de los indicadores de salud en Huasco entre 2016 y 2023. De hecho, en 2023 los riesgos evaluados disminuyeron y dejaron de ser estadísticamente significativos, como se explica a continuación:
· El riesgo de muerte por enfermedades cardiovasculares en Huasco bajó de un 71% sobre el promedio nacional en 2016, pasando a estar por debajo de este promedio en 2023.
· El riesgo de muerte por enfermedades cerebrovasculares, que en 2016 era 281% mayor al promedio nacional, bajó a un 72% y sin significancia estadística en 2023.
· La tasa de morbilidad general en Huasco disminuyó de 1.361,1 a solo 430,4 egresos hospitalarios por cada 10.000 habitantes entre 2006 y 2023, siendo más baja que el promedio nacional (743,5) y regional (740,5).
· La morbilidad por enfermedades respiratorias crónicas, bronquitis y asma también presentó descensos significativos, sin riesgo estadísticamente relevante en los datos más recientes.
3. Estos datos coinciden con una mejora comprobada en la calidad del aire en Huasco desde 2016, reconocida por la autoridad ambiental, como resultado de la implementación de una serie de medidas tales como pavimentación de caminos, prohibición de quemas y reducción de emisiones de fuentes industriales, todo ello en el marco del Plan de Prevención Atmosférica vigente en la comuna.
4. Llama la atención que el propio estudio cuestione la validez de la comuna de control (Caldera), al señalar que sus variaciones de salud no pueden explicarse con los datos disponibles, pese a que no tiene exposición industrial directa. Este hecho refuerza la necesidad de realizar nuevos estudios más robustos y multifactoriales que consideren también determinantes sociales, ambientales y de acceso a salud en todas las comunas evaluadas. A modo de ejemplo, un estudio realizado el año 2019 por el Centro UC de Toxicología y Medio Ambiental identificó 41 factores que pueden explicar la situación de salud en la comuna de Huasco, 38 de los cuales no se relacionan directamente con la presencia de su actividad industrial.
5. No existe ningún estudio concluyente que atribuya los problemas de salud de la población de Huasco a la operación de la Central Guacolda. Todas las emisiones de nuestra operación, incluyendo MP10, SO₂, NOx, se encuentran dentro de sus respectivas normas y no representan un riesgo significativo para la población, según múltiples mediciones oficiales y estudios técnicos realizados al efecto.
Guacolda Energía reitera su compromiso con la transición energética responsable, el cumplimiento estricto de la normativa vigente y el respeto a la salud y bienestar de las personas de Huasco. Por eso, estamos trabajando en un proyecto de reconversión mediante co-combustión con amoniaco verde, con foco en mantener un suministro de electricidad confiable, que aporte a la seguridad del sistema eléctrico y a la continuidad de las fuentes laborales en Huasco, como parte del rol social que la empresa desempeña en la zona.