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Fonda protegida, seguridad compartida

Las Fiestas Patrias son sinónimo de celebración, pero también de trabajo intenso para miles de personas que sostienen la tradición de nuestras fondas, ramadas y cocinerías. En medio de la música y la alegría, no podemos  olvidar que detrás de cada anticucho o empanada hay trabajadoras y trabajadores que, al igual que en cualquier otra época del año, cuentan con un derecho inalienable: la protección de la ley y el Estado.

La Ley 16.744, que establece el Seguro Social contra Riesgos de Accidentes del Trabajo y Enfermedades Profesionales, no solo contempla atención médica y cobertura económica en caso de accidente o enfermedad profesional, sino que lo hace bajo el principio de automaticidad, protegiendo al trabajador desde el primer día de la relación laboral, incluso sin aún no hay contrato escrito o no se han pagado a tiempo las cotizaciones.

Aquí es donde cobra protagonismo el Instituto de Seguridad Laboral (ISL), único organismo público administrador de este seguro. En estas fechas, su campaña “Fonda Protegida: Seguridad Compartida” busca reforzar la idea de que la prevención es la primera barrera de protección. El ISL despliega asesorías, visitas en terreno y material educativo en todo el país para que las fondas no solo sean espacios de alegría, sino también de trabajo seguro.

El rol del ISL no se limita a la reacción frente a accidentes, sino que se centra en la prevención de riesgos laborales. Disponer de agua potable, mantener la cadena de frío en los alimentos, capacitar en primeros auxilios o establecer protocolos de emergencia son medidas que salvan vidas y dignifican el trabajo en estas celebraciones. 

Pero más allá de las recomendaciones, lo central es el mensaje: la seguridad laboral es un derecho humano reconocido como fundamental en el trabajo. Por ello, la tradición se vive mejor cuando la responsabilidad es compartida:
empleadores que cumplen, trabajadores que se cuidan y un Estado que garantiza la protección. Y el ISL, con su labor, nos recuerda que una fonda protegida es una fonda más justa y humana.

Por Paulina Urizar López, Directora Regional, Instituto de Seguridad Laboral

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