Un ave muy especial
Los pingüinos son percibidos por las personas como unas aves muy simpáticas y adorables, pero su importancia va mucho más allá de eso, puesto que la existencia de estas aves no voladoras es vital para el mantenimiento del equilibrio ecológico de todos aquellos sitios en los que habitan.
El Día Mundial del Pingüino busca informar y educar a la gente, acerca del rol que tienen estas increíbles criaturas en los entornos en los que viven, cuáles son sus costumbres y hábitos, cómo es su relación con la biota circundante, qué peligros les acechan y qué se puede hacer para protegerlos y asegurar su supervivencia.
¿Cómo nació el Día Mundial de los Pingüinos
La fiesta fue instituida por los científicos que trabajan en la estación de investigación estadounidense McMurdo, que se encuentra en la Antártida, más precisamente en la isla Ross y que se dedican al estudio de los pingüinos de Adelia (Pygoscelis adeliae), cuya población local supera el medio millón de individuos.
En la Antártida sólo habitan dos tipos de pingüinos: los emperadores y los de Adelia; cada año al aproximarse el invierno, estos últimos inician una migración individual, que los llevará hacia el norte con el fin de alimentarse en zonas más cálidas y cuando llega el verano regresan a las costas antárticas para anidar y reproducirse.
Los investigadores comprobaron que los pingüinos de Adelia eligen precisamente el día 25 de abril para comenzar su migración y que este suceso se repite año a año, por lo que eligieron esta fecha para dar a conocer las costumbres de los pingüinos y alertar al resto del mundo acerca de los peligros que se ciernen sobre ellos, muchos de ellos debidos al cambio climático.
Los pingüinos también peligran
En todo el mundo viven 17 especies de pingüinos de las cuales 11 están clasificadas como vulnerables o en peligro de extinción y esto sucede porque según sus costumbres migratorias y alimenticias los pingüinos pasan la mayor parte de sus vidas en los mares, que están sufriendo graves cambios debido a las acciones antropogénicas.
El calentamiento de las aguas, la acidificación de los océanos, el deshielo acelerado, la suba del nivel de los mares o los cambios en la climatología que desestabilizan las zonas más frías del mundo como son los polos, están afectando directamente a la forma de vida de muchas especies, entre ellas a los pingüinos, que se quedan sin alimentos, pierden gran parte de su hábitat y sufren graves desfases entre sus costumbres migratorias y los nuevos patrones climáticos. Luchar contra el cambio climático, también es ayudar a los pingüinos.
FUENTE ECONOTICIAS
