Un grave hecho fue detectado al interior del Centro de Cumplimiento Penitenciario (CCP) de Copiapó, luego de que dos funcionarios de Gendarmería, un sargento primero y un cabo segundo, fueran sorprendidos con cuatro teléfonos celulares ocultos en sus bolsos personales, mientras se encontraban en servicio en el sector de guardia interna del Patio N°5.
El hallazgo se produjo durante una ronda inspectiva de rutina por las dependencias del recinto penitenciario.
Según se informó, fue el sonido de uno de los dispositivos lo que alertó al personal sobre la presencia de estos artículos, prohibidos por la normativa vigente.
La Ley N°21.494 sanciona el porte e ingreso de dispositivos tecnológicos de comunicación en establecimientos penitenciarios.
Por ello, Gendarmería realizó la denuncia respectiva ante el Ministerio Público e instruyó un sumario administrativo para esclarecer lo ocurrido y determinar eventuales sanciones.
Por su parte, el director (s) nacional de Gendarmería, Rubén Pérez, recalcó que la tenencia de celulares está absolutamente prohibida, y que la institución seguirá adelante con el proceso administrativo correspondiente.
Sin embargo, aclaró que aún no está definida una eventual expulsión de los funcionarios, ya que debe esperarse el resultado del sumario interno.
El caso también fue abordado por el Fiscal Adjunto de Copiapó, Luis Miranda, quien informó que los dos gendarmes fueron detenidos y puestos a disposición del tribunal durante este jueves.
Tras la audiencia de control de detención, se decretó en su contra la medida cautelar de arraigo nacional.