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Crítica de cine | “Bailarina”: El spin-off de John Wick no destiñe

La aclamada franquicia de acción regresa con una trama paralela a su protagonista, que mantiene el nivel de calidad en sus combates, aunque no tanto en su historia.

Desde su debut hace más de diez años, John Wick ha sido sinónimo de las mejores experiencias cinematográficas en términos de acción. Con grandes coreografías y secuencias de combate que combinan el talento individual con el técnico, esta saga ha mantenido un estándar de calidad muy alto a lo largo de sus entregas. Esta semana regresa con su primer spin-off: “Bailarina”.

Esta nueva historia sigue a una asesina entrenada en las tradiciones de la organización Ruska Roma -una sociedad secreta dentro del mundo de John Wick-, quien se embarca en una misión de venganza tras la muerte de su padre. Su odisea destapará secretos que conectan una amplia red criminal con su propio pasado.

“Bailarina” es una digna continuación del legado Wick que demuestra que el verdadero valor de la franquicia no recae únicamente en su protagonista, sino en el universo en que se desenvuelve. Con una gran Ana de Armas, aunque con varios cabos sueltos en su narrativa, este spin-off es un buen punto de partida para expandir nuevas historias en este mundo de asesinos. En esta nota, revisamos lo mejor y lo peor de este estreno en cines.

Innovando en el combate

Muchos sostendrán que la mejor parte de la saga John Wick es su acción. Con un estilo novedoso y dinámico, los creadores de este universo siempre encuentran formas frescas de desarrollar sus combates, y “Bailarina” no es la excepción.

Cada secuencia es única y se adapta a las restricciones del entorno, lo que aporta una sensación de autenticidad, a pesar de lo exageradas que puedan parecer. Ya sea solo con granadas, con un lanzallamas o simplemente a golpes, “Bailarina”, al igual que el universo Wick, garantiza que tendrás una experiencia que no has visto antes.

No obstante, el mérito de estas escenas también recae en la calidad técnica de su equipo de cámara y fotografía. La toma se fusiona con la coreografía para sumergir a la audiencia en el conflicto, incluso en espacios cerrados, donde otras películas optan por un estilo más caótico. “Bailarina” destaca el increíble trabajo del equipo técnico de esta saga, y es la gran razón para pagar una entrada al cine.

No innovando en el personaje

La fórmula que sigue esta franquicia es muy efectiva para la acción, pero no tanto para el desarrollo de personajes. Lamentablemente, “Bailarina” cae en la repetición de los mismos hitos emocionales que vimos en las dos primeras entregas de John Wick: venganza, sacrificio y resignación.

Esto le resta interés al rol de su protagonista, Eve, interpretada por Ana de Armas, quien, a pesar de mostrar un mayor rango emocional que el protagonista original, atraviesa arcos narrativos ya conocidos en esta saga, dejando una sensación de repetición al llegar a los créditos finales.

El problema radica en el guion, que no logra desarrollar del todo las cosas nuevas que intenta aportar al personaje de Eve: las conexiones con su pasado, su relación con los personajes que encuentra en el camino e incluso el hecho de que sea bailarina, son aspectos que el guion introduce, mas no profundiza. Esto no significa que la interpretación de Armas sea mala; por el contrario, la actriz cubana le da el peso necesario a Eve y transmite un sentido de urgencia. El problema está en los elementos que la rodean.

Un mundo con potencial

Siendo esta la quinta entrega de la saga (sin contar la serie de Amazon Prime), la película asume que la audiencia ya conoce la jerarquía social de este universo, por lo que se lanza de lleno a la acción desde los primeros minutos. Esto permite que “Bailarina” mantenga un ritmo alto hasta el final, con solo un par de conversaciones de exposición que interrumpen momentáneamente la acción.

Sin embargo, este enfoque también puede generar cierta confusión en quienes no están familiarizados con la saga, especialmente porque la historia se sitúa entre la tercera y la cuarta entrega de John Wick. Aun así, esto no afecta gravemente la experiencia en sala, ya que lo más importante es que la película cumpla con ofrecer escenas de acción que eleven la adrenalina.

Al final, “Bailarina” abre la puerta a más historias dentro de este universo de asesinos. Por supuesto, hay muchos aspectos que mejorar, especialmente ante la ausencia del icónico John Wick. Sin embargo, con nuevos arcos de personajes, la franquicia tiene potencial de sobra para mantenerse vigente en la industria por otra década adicional.

Recomendada para fanáticos de la saga o para quienes prefieren la acción por sobre la historia.

Nota: 3.5/5.0

“Bailarina” ya está disponible, solo en cines.

Fuente: Emol

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