Luego de más de tres meses de paralización, el conflicto entre tripulantes de la pesca artesanal y armadores en la comuna de Caldera ha llegado a un histórico acuerdo que permitirá reanudar las actividades en la pesca de cerco.
La resolución del conflicto fue el resultado de intensas negociaciones que incluyeron mesas de trabajo, mediación de autoridades locales y la participación de distintos actores del sector pesquero e institucional.
Durante un mes, ambas partes, tripulantes y armadores, participaron activamente en instancias de diálogo que contaron con la mediación de la alcaldesa Brunilda González, quien actuó como Ministra de Fe, junto a la concejala Natalia Muñoz y el dirigente Natán Pereira.
También formaron parte del proceso parlamentarios de la región y representantes de la Pesquera Blumar, Sernapesca, Subpesca, y la Armada de Chile.
El vocero de los armadores, Benjamín Vargas, comentó destacó que fue un camino largo, pero que gracias al diálogo se logró llegar a una solución.
El acuerdo fue formalizado en una notaría de la comuna, y establece principios clave para garantizar la sostenibilidad de la actividad pesquera y el bienestar de las personas involucradas.
Algunos de los puntos fundamentales son: Resolución de conflictos mediante el diálogo y mediación; Cumplimiento de la palabra empeñada y los compromisos asumidos; Participación activa de veedores designados por ambas organizaciones para dar fe del cumplimiento y suspensión de actividades en caso de conflicto hasta su resolución.
El vocero de los tripulantes, Erick Gómez, señaló que se trata de un acuerdo histórico y que gracias a este acuerdo se espera recuperar el trabajo y la dignidad del sector.
La alcaldesa Brunilda González valoró el proceso de diálogo y subrayó su importancia para la economía de la comuna.