La Selección Chilena sepultó la ilusión de clasificar al Mundial de 2026 después de caer estrepitosamente con Bolivia por 2 a 0 en El Alto. Esta fue la gota que rebasó el vaso, considerando que en el proceso de Ricardo Gareca solo ganó una vez -contra Venezuela-, teniendo uno de los peores desempeños de la historia.
El combinado nacional, a falta de dos partidos, se encuentra último en la tabla de posiciones con 10 puntos y se quedó fuera por tercera vez consecutiva de la cita internacional. Incluso, para esta edición se contemplaban seis cupos de manera directa, y aun así no pudo meterse entre los representantes de Sudamérica.
Con la salida de Ricardo Gareca de la banca de La Roja, ahora la dirigencia encabezará la labor de buscar un entrenador a la altura de una Selección que hace unos años gozaba de ganar dos Copa América y disputar la Copa Confederaciones con los máximos exponentes a nivel mundial.
Solo bastan dos fechas para que finalicen las Clasificatorias, las que se disputarán en septiembre de este año, unos días antes de las Fiestas Patrias. En aquella oportunidad, Chile tendrá dos difíciles compromisos, uno de ellos con Brasil de visita y el último con Uruguay de local.
El objetivo es no terminar último en la tabla general, teniendo en cuenta que todavía es posible alcanzar a Perú, que cuenta con 12 unidades y que podría tropezar. No obstante, el panorama para La Roja es mucho más complicado, puesto que enfrentará a dos campeones del Mundo.
Una vez que terminen las Clasificatorias, la Selección Chilena pretende disputar un encuentro amistoso con Rusia, en noviembre. Eso sí, este cotejo ya causó polémica, luego de que el embajador de Ucrania, Yurii Diudin, le protestara a Pablo Milad, presidente de la ANFP, haciendo énfasis en el conflicto bélico que viven ambos países desde febrero de 2022.
La idea es que la ANFP ya haya elegido el técnico de La Roja para ese entonces, aunque es probable que Milad se tome su tiempo, puesto que el combinado nacional no afrontará ninguna competición oficial hasta después del Mundial de 2026, el cual se disputará a mediados de ese año en Canadá, Estados Unidos y México.
El mandamás del fútbol chileno aseguró en una conferencia de prensa postpartido con Bolivia que abocará sus esfuerzos en buscar un gerente de selecciones y que se apoyará con asesores externos para buscar la mejor opción para el banco del seleccionado nacional: “Lo que viene sería un proyecto de las Clasificatorias que comiencen en marzo 2027“, sostuvo.
Los primeros dos desafíos de las próximas Clasificatorias al Mundial de 2030 serían con Uruguay (de visita) y Colombia (de local), en caso de mantenerse el calendario.
Una vez que empiece el próximo proceso clasificatorio, el combinado nacional afrontará la Copa América de 2028, la cual todavía no tiene una sede confirmada, aunque podría ser Argentina, que no pudo ser anfitriona en 2021 por la pandemia de coronavirus.
Como es habitual, la competencia contará con todos los países de Conmebol que disputan las Clasificatorias, pero también podría haber invitados, lo que ha ocurrido en otras ediciones.
Este es el primer gran objetivo del equipo chileno, que recién competirá en un torneo oficial casi tres años después del término del actual proceso clasificatorio.
FUENTE MEGANOTICIAS