El joven policía, oriundo de Renaico, fue abatido en medio de una persecución por un delincuente, sujeto que también falleció tras ser baleado por otro uniformado.
Carabineros confirmó la muerte de Breant Washington Rivas Manríquez, uniformado de 23 años que fue asesinado este jueves en medio de un procedimiento, en Chillán.
Rivas, oriundo de Renaico, era soltero y tenía un pequeño hijo de dos meses de vida.
Además, era parte de la institución desde hace un año y dos meses, transformándose en un nuevo mártir de la policía uniformada.
CÓMO OCURRIÓ EL CRIMEN
De acuerdo a lo señalado por la institución, Rivas fue abatido tras un violento hecho sucedido en la intersección de calle Eduardo Ossandón con pasaje Juan Francisco González, donde policías fiscalizaron un vehículo que transitaba por la zona.
Aprovechando un descuido de las autoridades, los hombres huyeron a pie, iniciándose una persecución a cargo del carabinero Breant Washington Rivas Manríquez, quien logró detener a uno de los involcurados.
Sin embargo, informó la institución, en ese instante apareció en el sitio un tercer hombre, quien disparó mortalmente a Rivas.
Dicha situación fue vista por el jefe de patrulla, suboficial Patricio Arauco, quien repelió la acción del antisocial con su arma de servicio, provocándole diversas lesiones a balas que le provocaron el fallecimiento en el sitio del suceso.
El funcionario lesionado fue llevado hasta el Hospital Herminda Martin, zona donde murió debido a la gravedad de su estado.
Rivas, de 23 años, tenía un pequeño hijo de dos meses de vida y solamente contaba con dos años de servicio.
Cabe señalar que al interior del vehículo que originó el procedimiento fueron encontradas diversas dosis de marihuana, mientras que el arma del asesino fue incautada.
Fuente: 24 Horas