Llega la primavera y, con ella, la necesidad de una renovación. Una forma de hacerlo es deshacerse de lo que ya no servirá con una limpieza profunda de casa, en la que además, se puede eliminar el polvo, suciedad y humedad acumulados en las épocas más frías del año.
Durante el invierno, los espacios permanecen más cerrados, lo que acumula alérgenos como polvo, ácaros y moho que pueden afectar la salud. En ese contexto, una limpieza profunda puede disminuir la intensidad de las alergias, los problemas respiratorios, mejorando la calidad del aire y reduciendo la exposición a bacterias.
En ese sentido, Nelson Pérez, fundador de la compañía especialista en aseo para empresas, Serlimex, afirmó en entrevista con BioBioChile que “durante el invierno, los espacios permanecen más cerrados, lo que acumula alérgenos como polvo, ácaros y moho que pueden afectar la salud. Una limpieza profunda garantiza menos alergias, menos problemas respiratorios mejorando la calidad del aire y reduciendo la exposición a bacterias”.
Además, una limpieza que acompañe la transición de temporada detecta y elimina a tiempo focos de humedad y suciedad que, a largo plazo, dañan estructuras y muebles; previene la proliferación de plagas; da una mejor impresión a clientes (en oficinas); y transmite una sensación de bienestar y calma.
Cómo organizar la limpieza para que sea más efectiva
Hacer un aseo profundo no es suficiente para recibir la primavera ¿Sabías que el orden y organización de esta puede influir en su calidad, duración y el tiempo en el que se realiza?
Al respecto, Pérez afirmó que “influye en la calidad y en la duración del resultado. Si se mezclan productos de forma incorrecta se pueden generar gases tóxicos o si se limpian áreas en desorden, se pierde tiempo, se ensucia de nuevo”.
“Es crucial no mezclar productos como el cloro con amoníaco o vinagre, ambos generan vapores perjudiciales para la salud. De la misma forma, no se debe almacenar productos de limpieza cerca de alimentos, guardándolos en un lugar fresco y seco”, añadió.
Como indicó el experto, la clave está en organizarse por etapas y zonas. Es recomendable partir de arriba (techos, lámparas, repisas y muebles altos) hacia abajo, ya que así el polvo no ensucia lo que ya está limpio. Con la misma finalidad, es indispensable iniciar al fondo de las habitaciones hacia la salida, y partir en espacios individuales, como piezas u oficinas y luego avanzar a áreas comunes y entradas.
Así, para que no se vuelva una tarea abrumadora, desde la empresa sugieren comenzar ventilando, para renovar el aire y reducir la concentración de líquidos, para luego clasificar lo que se mantendrá, donará o desechará y retirar la basura.
Después de sacudir y desempolvar, es óptimo comenzar con los limpiadores húmedos específicos, para finalizar con la limpieza de superficies y cerrar con orden y aplicación de aromatizantes y difusores de olores.
Productos específicos: qué usar para cada parte del hogar:
- Desengrasantes: cocina, electrodomésticos.
- Antisarro o desincrustantes: baños, grifería.
- Desinfectantes: baños, superficies de contacto (mesones, manillas, teclados). *Recordar nunca mezclar productos clorados con amoníaco o desengrasantes, puede ser tóxico.
- Limpiavidrios: cristales y espejos. Limpiadores específicos según material: muebles y pisos.
- Pisos: de atrás hacia adelante, con el producto adecuado según material (madera, cerámica, vinilo).
Rincones olvidados del hogar y la oficina
Aunque se limpie y aparentemente esté todo impecable, existen rincones que suelen quedar olvidados en la rutina de aseo y que, con el tiempo, se transforman en focos de polvo, ácaros y bacterias.
En los hogares, los más descuidados son los espacios detrás y debajo de los muebles y electrodomésticos, donde la humedad puede generar moho. También las ventanas, cortinas, persianas y alfombras acumulan polvo, humedad, grasa y ácaros, mientras que colchones y almohadas requieren desinfección periódica.
A eso se suman las zonas altas del hogar, los baños, closets y bodegas, que fácilmente se llenan de suciedad y objetos olvidados.
En las oficinas, los principales focos están en los teclados y puestos de trabajo, que concentran bacterias. También sillas, tapices, cielos falsos, luminarias y sistemas de ventilación, que sin mantenimiento se convierten en fuentes de alérgenos. Áreas comunes como cocinas y comedores, además de archivos y muebles poco usados, completan la lista de espacios que suelen quedar en segundo plano.
Kit básico de limpieza
- Desinfectante multiusos: a base de amonio cuaternario o cloro según superficie.
- Limpiador neutro: pisos de madera, vinilo o superficies delicadas.
- Desengrasante: cocinas, hornos, microondas, superficies metálicas.
- Antical o limpiador de sarro: grifería, baños, azulejos, etc.
- Limpiavidrios: ventanas, espejos, mamparas, etc.
- Ambientadores: para dar un toque final de frescura.
- Aspiradora: ideal para polvo, ácaros y alfombras.
- Mopa y baldes: uno para agua con detergente y otro para enjuague.
- Paños de microfibra: evitan rayas y atrapan mejor el polvo.
- Cepillos de cerdas duras y suaves: juntas, esquinas y tapices.
- Plumeros: zonas altas, lámparas, repisas.
- Guantes y mascarilla: protección personal.
- Escobilla para inodoro: llegan a lugares difíciles.
- Esponjas con doble cara: suave y abrasiva.
- Bolsas de basura resistentes: desechos.
- Vaporizador o limpiador a vapor: (opcional) útil para desinfección sin químicos.
Para quienes cuentan con poco tiempo, Nelson Pérez especificó que “en 30 a 40 minutos, un espacio puede quedar ordenado, fresco y presentable, aunque no sea una limpieza profunda. Si no cuentas con más tiempo te recomendamos seguir el siguiente orden (…) ventilar – eliminar basura y desorden visible – limpiar superficies de alto uso – baños – pisos de áreas visibles y detalles como: usar aromatizados, limpiar pantallas, ordenar sillas, acomodar cojines, etc”.
Serlimex es una empresa dedicada al aseo, con servicios para oficinas, condominios, inmobiliarias, obras y particulares. Con años de experiencia y más de 15 clientes, nació como iniciativa de Nelson Pérez, un profesional venezolano que, como asegura en un comunicado de prensa, “vio a Chile como un país de oportunidades, ha consolidado la empresa en torno a valores, responsabilidad y calidad”.
Revisa la historia de Nelson Pérez en el siguiente video:
Para saber más de Serlimex, ingresa a este enlace.
FUENTE: BIOBIO CHILE