El próximo 6 de diciembre, la Escuela Primaria N° 406 de Palo Blanco, en Argentina, será escenario de un acontecimiento cultural sin precedentes: el estreno de TAITA KOLLA, una película que rescata la memoria de los arrieros y proyecta la identidad andina hacia escenarios internacionales. La obra, dirigida por el cineasta atacameño Christian Milla Mancilla, revive la historia de Don Marcos Bordones Reales y de tantos hombres y mujeres que cruzaron la Cordillera de Los Andes llevando ganado, sueños y tradiciones.
El director explicó que la motivación detrás de esta producción está profundamente ligada a su propia historia familiar, pues la película se inspira en la vida de su tatarabuelo.
La producción contó con la participación activa de los vecinos de Palo Blanco en Catamarca, Argentina, quienes se sumaron como actores y colaboradores. Este gesto no solo fortaleció el vínculo comunitario, sino que también permitió que la identidad local quedara plasmada en la pantalla grande. La experiencia generó entusiasmo y orgullo entre los habitantes, que ahora esperan verse reflejados en una obra que trasciende fronteras.
El rodaje incluyó escenas en Catamarca y en la cordillera chilena, mostrando la unión cultural entre ambos territorios. Milla destacó que la historia de los arrieros refleja una tradición compartida que trasciende las fronteras políticas y que sigue viva en la memoria de las comunidades.
El director también subrayó la proyección internacional de TAITA KOLLA. Con siete obras audiovisuales en su trayectoria y presencia en festivales de renombre como Cannes, San Sebastián, Hollywood y Bollywood, Milla confía en que esta producción binacional marcará un antes y un después para Palo Blanco y para su carrera como cineasta.
El estreno de TAITA KOLLA será con entrada libre y gratuita, y se espera una gran concurrencia de vecinos, instituciones y amantes del cine. Más que una película, se trata de un homenaje a la historia compartida, un canto a la identidad andina y un puente cultural que vuelve a unir, como lo hicieron los arrieros, las tierras de Chile y Argentina bajo el mismo cielo cordillerano.





