La diputada por la Región de Atacama, Sofía Cid Versalovic, expresó un categórico rechazo al anuncio del ministro de Justicia, Jaime Gajardo, sobre la construcción de una nueva megacárcel en el sector de El Arenal, a pocos kilómetros de Copiapó. La iniciativa, presentada como un hito de inversión pública en la región, ha sido duramente cuestionada por su impacto territorial, social y comunitario.
“Ministro, ¿usted de verdad cree que la gente de Atacama pidió una cárcel en El Arenal? Usted dice que es un anhelo regional. Eso no es cierto. Nadie nos preguntó. Esta decisión se tomó desde Santiago, otra vez sin considerar el impacto en la calidad de vida de nuestra gente”, señaló la parlamentaria.
El proyecto contempla más de 2.100 plazas penitenciarias y se ubicaría en plena entrada aérea de la región, muy cerca de comunidades como San Pedro, Piedra Colgada y Valle Fértil.
“He conversado con los vecinos. En San Pedro, Piedra Colgada, Valle Fértil… la gente no quiere una megacárcel al lado de sus casas. Quieren tranquilidad, oportunidades, servicios. Pero una vez más, se impone una decisión sin diálogo.”
Lo que más ha indignado, según Cid, es que el Gobierno ha presentado esta cárcel como la principal inversión en infraestructura pública en Atacama.
“¿La gran obra del gobierno en Atacama es una cárcel? ¿En serio? Tenemos hospitales esperando recursos, caminos sin terminar, problemas graves con el agua, estamos peleando por una unidad de angiografía y nos dicen que la mejor inversión que pueden hacer es encerrar gente. Parece una burla.”
Además, la diputada criticó la ausencia total de un plan integral para el sistema penitenciario en la región, donde ya existen tres cárceles mal emplazadas en pleno centro urbano: Copiapó, Vallenar y Chañaral.
“En Copiapó, la cárcel está rodeada de colegios, viviendas y vecinos. En algunos establecimientos educacionales incluso tienen protocolos de emergencia en caso de disturbios al interior del penal. ¿Eso es normal? ¿Eso es desarrollo? Lo mismo pasa en Vallenar y Chañaral. ¿Y ahora sumamos otra cárcel más sin cerrar ninguna?”
Cid enfatizó que una cárcel moderna debe ubicarse lejos de zonas pobladas, como se hace en países que planifican con responsabilidad:
“Una cárcel debe estar al menos a 100 kilómetros de cualquier área urbana. No es solo por seguridad, es por respeto a la comunidad, por proyección de territorio, por calidad de vida.”
Finalmente, la diputada anunció que llevará el tema al Congreso, oficiará a los ministerios y recorrerá los sectores afectados para escuchar directamente a las comunidades.
“No lo voy a permitir. Y sé que los vecinos tampoco. Vamos a alzar la voz. Atacama no puede seguir siendo el lugar donde se ponen las cosas que nadie quiere en Santiago. Nuestra región merece inversión real, desarrollo humano, y decisiones pensadas con y para la gente.”