Un inusual y preocupante hecho se registró esta semana en el sector norte de Copiapó, donde un ejemplar juvenil de zorro chilla fue encontrado con la cabeza atrapada en un frasco plástico, una situación que puso en evidencia los impactos de la contaminación en la fauna silvestre.
El animal fue avistado por vecinos en las tomas de la población Los Minerales, colindante con los cerros, quienes lograron guiarlo hasta una zona de cuevas cercana a una cancha de fútbol. Allí, el Servicio Agrícola y Ganadero (SAG), alertado por los residentes, logró concretar su rescate.
El ejemplar fue trasladado a las oficinas del SAG, donde fue examinado por personal veterinario. La directora regional del organismo, Carla Montiel González, detalló que el zorro se encontraba en buen estado general, sin lesiones visibles, aunque claramente afectado por el estrés de la situación. “La veterinaria y el personal pudieron cortar el frasco y liberar la cabeza del zorro, lo que permitió que pudiera respirar mucho mejor”, explicó.
Tras una breve evaluación clínica, en la que se constató que el animal comía y bebía normalmente, fue reinsertado en su hábitat natural, en una zona alejada del radio urbano.
Montiel agradeció la oportuna acción de la comunidad y reiteró el llamado a cuidar el entorno: “La basura es una amenaza real para la fauna. Este zorro probablemente bajó buscando comida, y afortunadamente no fue atacado por perros. Por eso pedimos no dejar residuos y mantener nuestras áreas limpias”.
Además, la directora del SAG recordó que no se debe alimentar ni acercarse a la fauna silvestre, salvo en situaciones excepcionales como lesiones, atrapamiento o si se encuentran en peligro. En esos casos, la recomendación es contactar directamente al SAG o Carabineros.
Este caso refleja el impacto directo que la acción humana puede tener en el ecosistema local, así como el valor del compromiso comunitario con el resguardo de la biodiversidad de Atacama.