Rodeada por un ecosistema hostil, en medio de pantanos, caimanes, cocodrilos, pitones y hasta panteras, se ha comparado con la mítica prisión de Alcatraz en San Francisco.
Estados Unidos ha sorprendido al mundo con el anuncio de un nuevo y controvertido centro de detención migratoria, bautizado informalmente como “el Alcatraz de los caimanes”, una cárcel para migrantes en situación irregular que ya genera polémica por su ubicación, condiciones y simbolismo.
Ubicada en el corazón de los Everglades, al sur del estado de Florida, esta prisión comenzará a operar el 1 de julio y está diseñada para albergar a más de 3.000 migrantes mientras esperan sus procesos de deportación.
Una prisión “naturalmente infranqueable”: rodeada de caimanes, pitones y cocodrilos
La cárcel ha sido presentada por autoridades estadounidenses con una narrativa digna de una serie de suspenso. Rodeada por un ecosistema hostil, en medio de pantanos, caimanes, cocodrilos, pitones y hasta panteras, se ha comparado con la mítica prisión de Alcatraz en San Francisco. Pero a diferencia de aquella, esta no está rodeada por agua salada, sino por la impenetrable vegetación de los Everglades, lo que haría prácticamente imposible cualquier intento de escape.
El lugar fue construido sobre un antiguo aeródromo de entrenamiento militar, lo que refuerza su carácter estratégico. Además, cuenta con una pista de aterrizaje de grandes proporciones, destinada a facilitar el traslado de los migrantes deportados directamente desde el recinto.
El proyecto fue anunciado el pasado 18 de junio y, en una movida sin precedentes, su infraestructura básica se levantó en apenas 24 horas. Según las autoridades, en menos de una semana estará operativa y lista para recibir a sus primeros detenidos.
El centro nace en el contexto de un endurecimiento de las políticas migratorias promovido por la administración de Donald Trump, que ha presionado por acelerar los procesos de deportación. Sin embargo, la falta de recursos y la oposición pública han dificultado la implementación de estas medidas a gran escala.
Críticas por impacto ambiental y violaciones legales
La ubicación del recinto ha desatado la ira de organizaciones medioambientales y comunidades locales. Activistas y defensores del ecosistema de los Everglades han protestado activamente en la carretera 41, cercana al recinto, advirtiendo sobre los riesgos ambientales y humanos que implica el proyecto.
La organización Amigos de los Everglades, fundada en 1969, presentó una demanda contra el Departamento de Seguridad Nacional (DHS), el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) y autoridades estatales, alegando que la construcción no cumplió con las evaluaciones de impacto ambiental exigidas por ley. “No consideraron la seguridad de las viviendas, ni el impacto sobre la biodiversidad ni la amenaza de los huracanes”, denuncian.
El polémico centro de detención de los Everglades tendrá un costo operativo estimado de 450 millones de dólares al año, recursos que serán gestionados por el ICE y otras agencias federales. Mientras tanto, continúa creciendo la oposición política, ciudadana y jurídica a una instalación que, para muchos, simboliza una criminalización de la migración y una amenaza ecológica sin precedentes.
FUENTE T13
