La inteligencia estadounidense afirmó que Rusia utiliza misiles fabricados en Corea del Norte en su guerra contra Ucrania y que al mismo tiempo busca reabastecerse en Irán con otros proyectiles de corto alcance, según informó el jueves la Casa Blanca.
El portavoz del Consejo de Seguridad Nacional, John Kirby, dijo que los norcoreanos le han dado a Rusia plataformas para misiles balísticos y varios proyectiles.
Agregó que las fuerzas militares del Kremlin lanzaron por lo menos uno de esos misiles balísticos contra Ucrania el 30 de diciembre, que cayó en la región de Zaporiyia, y el martes dispararon varios proyectiles norcoreanos como parte de un ataque nocturno. Los misiles tienen un rango de alrededor de 885 kilómetros.
La inteligencia estadounidense cree que el régimen de Kim Jong-un quiere que Rusia a cambio de esas armas le dé aeronaves, misiles tierra-aire, vehículos blindados, equipos para la producción de misiles básicos y otras tecnologías avanzadas.
La evaluación estadounidense se añade a la realizada por las autoridades de Corea del Sur, de que el gobierno norcoreano ha intensificado su cooperación con Moscú.
Las fuerzas surcoreanas dijeron en noviembre que sospechan que Corea del Norte le ha enviado a Rusia un número no especificado de misiles balísticos de corto alcance, misiles antitanque y misiles antiaéreos portátiles, además de fusiles, lanzagradas, morteros y proyectiles.
Kirby indicó, además, que “las negociaciones rusas para adquirir a Irán misiles balísticos de corto alcance están avanzando activamente”.
El gobierno estadounidense ha advertido que Rusia se ha vuelto dependiente de Corea del Norte e Irán para las armas que usa en su guerra contra Ucrania, publicando evaluaciones de inteligencia que contienen esas apreciaciones.
La Tercera