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7 cosas que quizás no sabías de “El Agente Topo”

Para llegar a la comuna de El Monte hay que salirse de la Autopista del Sol vía Camino La Palma, tomar la Ruta G-78 y cruzar el Río Mapocho. Ubicada en la Provincia de Talagante, esta comuna de 36 mil habitantes (según el Censo 2017) hoy adquiere ribetes que trascienden las fronteras nacionales.

A un costado de la Plaza Independencia, específicamente en Avenida Los Libertadores 234, se encuentra el Hogar de Ancianos San Francisco. Una gran casona con arquitectura colonial que, emplazada en este pequeño y tranquilo pueblo, pareciera pertenecer a un Chile de varias décadas atrás.

Sin embargo, nada más 2021 que este Establecimiento de Larga Estadía del Adulto Mayor (ELEAM), locación que dio vida a una de las películas nacionales con más alto impacto del último tiempo: El Agente Topo.

Dirigida por Maite Alberdi y protagonizada por el carismático Sergio Chamy (87), la cinta lleva el género documental a nuevos límites retratando, como si un guion de ficción lo delinease, la realidad de un hogar de ancianos que está siendo investigado por don Sergio, agente encubierto que busca descubrir si una de las residentes está recibiendo o no las atenciones y cuidados que se merece.

La película, estrenada el 25 de enero de 2020 en el Festival de Cine de Sundance, rápidamente obtuvo nominaciones en el circuito de festivales internacionales, como los Premios Goya o el Festival de Cine de San Sebastián (donde obtuvo un galardón). Tanto fue su reconocimiento que llegó a ser nominada en los Premios Oscar 2021 en la categoría Mejor Largometraje Documental.

Pero volviendo a donde todo se originó, en la apacible comuna de El Monte, el hogar de ancianos se mantiene incólume durante una tarde de viernes de abril. Esa tarde, en la previa de la premiación de los Oscar 2021, CNN Chile llegó hasta la Plaza Independencia y conversó con Yolanda “Yolita” Vidal, una técnico en Enfermería que trabaja hace 14 años en el hogar.

Yolita, quien manifiesta un tremendo cariño y devoción hacia su trabajo, aparece en la película como una de las TENS que cuida y atiende tanto a Don Sergio como a las entrañables Marta Olivares, Berta Ureta, Zoila González, Petronila Abarca y Rubira Olivares, por nombrar a las más populares.

A continuación, 7 cosas que quizás no sabías de El Agente Topo en la voz de una testigo y parte de la historia tras la filmación encubierta del equipo de Maite Alberdi en el Hogar de Ancianos San Francisco:

1. Con psicólogos: El estreno de “El Agente Topo” en el hogar

Las grabaciones de lo que finalmente fue la película se hicieron en 2018. En estos tres años, varias de las protagonistas han fallecido y apenas dos de las que aparecen en el documental siguen con vida.

No obstante, para el estreno de la película, a comienzos de 2020, el personal de San Francisco realizó un evento para que las residentes vieran la cinta que retrata el hogar que habitan. Pensando en el duro impacto que podría ser la cinta para ellos, testearon primero con profesionales si es que era apropiada que la vieran o no.

“Pedimos autorización para ver la película. Nos indicaron que dos psicólogos vieran la película, quienes nos autorizaron a que los residentes que estaban cognitivamente bien. Posterior a eso la vieron, pero fueron sentimientos encontrados porque muchas de las que salen en la película ellos ya no están”, cuenta.

2. Sonia (“el blanco”) no estaba realmente en abandono

Cómo olvidar a Sonia, si finalmente la historia gira, en parte, en torno a ella. Don Sergio responde al anuncio de trabajo que encontró en el diario y se le da una clara misión: infiltrarse en una residencia para la tercera edad y descubrir si “el blanco” era víctima de robos o malos tratos.

Con una profunda crítica y sabor amargo, en su último reporte, el hombre le dice a quien lo contrató que Sonia estaba siendo bien cuidada en el hogar, pero que se sentía abandonada, al igual que la mayoría de los residentes.

¿Estaba Sonia efectivamente abandonada? La profesional asegura que no. “Tenía dos hijos. Ellos venían a visitarla. Se hacían presentes siempre. No sé por qué motivo de la hija quiso saber más sobre cómo se trataba a su mamá”, manifiesta. Sonia no estaba sola, en pasado, sí, porque falleció durante la pandemia del coronavirus.

3. Marta y Zoila no eran amigas

Ir al baño juntas, comer juntas, tomar el sol juntas y -por qué no- hablar mal de otras personas (bueno, bien también). Para eso están las amigas y estas dos nos demostraron una vez más que de a dos es mejor, pero qué pasa si les contamos que Marta y Zoila en verdad no eran tan amigas.

La realidad es que ambas mujeres sufren de demencia senil y, según Vidal, ambas se juntaban (o las juntaban) para grabar y luego cada una tomaba su camino. “De repente las veíamos y estaban grabando la escena, pero terminaban y ellas no se conocían”, comenta.

4. Bertita ignoró a don Sergio cuando él le dijo que no

¿Tóxica? Díganle como quieran, pero la verdad es que para el amor no hay edad y más aún si es con la intensidad que proporciona Bertita. Lo cierto es que don Sergio nos partió el corazón a todos con la película, pero a Bertita se lo destrozó cuando se negó a acompañarla al banco.

“La Bertita sí se enamoró de don Sergio. Yo en un momento determinado subo y empezamos hablar y la veo demasiado enganchada y voy a la dirección y le digo a Maite que teníamos que hablar con Bertita porque algo estaba pasando”, relata la TENS.

“Ahí empezamos nosotros a hablar de don Sergio y le dimos a entender que no podía ser. Ella sí se enamoró de don Sergio y se enojó cuando le dijo que no, lo ignoró. Ya no fue el mismo Sergito”, añade.

5. Lo que hay detrás del comportamiento de Marta

Con la esperanza de salir del hogar, Marta llegaba hasta la puerta principal y le rogaba a los transeúntes que la sacaran. Al contar la historia, Vidal se ríe. Explica que a Martita le dieron una llave (que no era del portón) y ella se fue directo a la entrada.

“Con la directora nos enojamos, porque dijimos ‘no, no, no, porque después podía tomar una llave que pudiese hacerle”, afirmó. Sobre la razón de su gusto por estar en la puerta, la funcionaria dice que a la adulta mayor le hablaban desde afuera.

6. El personal del hogar se dio cuenta que don Sergio era espía

Trataba y trataba de pasar desapercibido, aunque fuera difícil por sus cualidades detectivescas innatas y su deseo de descubrir la realidad en torno a “el blanco”. En la cinta, cumple su misión y se retira del hogar sin levantar un ápice de sospecha. Pero, ¿en verdad fue tan así?

Yolita revela que las grabaciones duraban prácticamente todo el día, ya que la producción llegaba a eso de las 10 de la mañana y se iba a las 5 de la tarde. “Ahí fue cuando enganché más, cuando Sergio se empezó a ir con ellos. Maite (Alberdi) puede que diga ‘Yolita está revelando todo’, pero una se dio cuenta en el fondo. Por lo menos la dirección, el personal y yo obviamente que sí”, expresa.

7. La soledad reflejada en la cinta no es lo que se vive en el hogar

Abandono y soledad. Dos conceptos que parecen hacerle sentido a los residentes del Hogar San Francisco, que esperaban con ansias las llamadas y visitas de sus familias. Aunque parecían estar bien cuidados, había un sentimiento de angustia que se veía reflejado en sus rostros.

Sobre esto, la profesional indica que el abandono reflejado en el filme no es la realidad que se vive en la residencia. “Por lo menos acá no se vive. A nivel nacional sí. Yo creo que ahí la verdad se equivocaron un poquito, porque la verdad que tampoco se grabó cuando venían los apoderados y venían a diario”, asegura.

¿Qué era real entonces? “La realidad de la película en este Eleam es el cariño. Funcionaria que entra, mi prioridad es entregar el cariño, el respeto al adulto mayor y después vamos enseñando las tareas, pero lo vamos aprendiendo en el camino, pero sí el respeto. Lo primordial para entrar a nuestro hogar es el respeto con el adulto mayor”, cierra.

FUENTE CNN CHILE

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